¡Cocina de diseño!
Nos encontramos ante dos platos de cocina moderna y… ¡con mucho estilo!
El primer plato está elaborado por un comensal de 2º de primaria y el segundo dibujo nos lo ha traído al restaurante un comensal de 6º de primaria. Ambos dos, son representaciones donde aparece el comensal y el chef (en este caso, yo) y nos lo han regalado para decorar las paredes de nuestra cocina.
Aunque, aparentemente, son elaboraciones similares, podemos decir que se diferencian en algunos elementos. ¡Ninguna elaboración es igual, ya que cada comensal es diferente!
En el primer dibujo, comensal de 7 años, se puede observar como da gran importancia a la representación del emplatado (paisaje) y menos a los elementos principales (esquema corporal de las personas). Este hecho se produce porque a estas edades están todavía construyendo su propia imagen corporal; diferencia sus partes más importantes (esquema corporal) y se puede ver en el dibujo, pero no se detiene a plasmar la elaboración. Cabe destacar que ni siquiera pone vestimenta.
En cambio, en el segundo dibujo, comensal de 12 años, se observa que el emplatado es más sencillo (entorno), pero los elementos principales están elaborados con más cuidado, minuciosamente; incluso añade vestimenta. En este caso, se representan los elementos que componen el esquema corporal porque ya tiene una buena imagen corporal y su conciencia corporal está interiorizada; aunque, en la adolescencia se vea modificada.

En conclusión, quiero destacar que según el niño se va desarrollando en el proceso educativo, va adquiriendo destrezas y capacidades. Por lo que, en la cocina pasa lo mismo; según se desarrollan sus habilidades culinarias, se perfecciona su esquema corporal, dominando sus elementos; y con ello, construye su propia imagen corporal y desarrolla su conciencia corporal (relación entre el esquema y la imagen).